PIEMONTE

El Blangé es un vino blanco culto de Piemonte, una expresión rica y exuberante de la variedad autóctona Arneis que se convirtió en un ícono en los años 80 y 90. Su éxito dura hasta hoy y está presente en los restaurantes de todo el mundo como uno de los blancos más famosos de Italia, best seller y long seller al mismo tiempo. Nació en 1985 de la intuición de la familia Ceretto como una gran apuesta de los hermanos Bruno y Marcello que, en el periodo de gloria de los grandes tintos piemonteses, redescubrieron una variedad casi olvidada: el Arneis. Una elección innovadora e impensable en la época que, sin embargo, resultó ser una intuición genial y exitosa.

El nombre del Arneis Ceretto proviene de la pronunciación dialectal de uno de los primeros terrenos de los que los Caretto Brothers comenzaron a producir esta etiqueta. Se trata de la ‘vigna del panettiere’, ‘boulanger’ en francés, así llamada porque en su momento fue poseída por un panadero francés que llegó en el siglo XVIII al Roero tras el armisticio de Cherasco. La palabra de impronta francesa contribuyó al gran éxito, junto con la gráfica de diseño innovador y atractivo: una botella transparente con una etiqueta blanca con letras doradas diseñada por Silvio Coppola, arquitecto milanés de fama internacional.

Las características que han hecho tan célebre el Ceretto Blangé son mérito del espíritu audaz y artístico del enólogo Donato Lanati que, para valorizar su carga y la intensidad aromática, inauguró en los años 80 la técnica de la criomaceración, es decir, el contacto de las pieles con el mosto durante aproximadamente 12 horas a una temperatura de 5°C. Esta técnica favorece la máxima extracción de los aromas primarios de la uva salvaguardando la limpieza aromática y la delicadeza del fruto. Los aromas son, de hecho, intensos y variados: pera, manzana, durazno, cítricos y mucha fruta tropical. El sorbo confirma el alma intensamente afrutada, unida a una equilibrada frescura y a una buena persistencia. Un blanco que ha escrito la historia de los blancos de las Langhe y que se confirma aún hoy como muy agradable y atractivo, apreciado por aficionados de todo el mundo, amado por los jóvenes y las mujeres.

Color
Amarillo pajizo intenso

Sabor
Frutado, fresco y seco, con toques aromáticos de manzana y pera

Aroma
Rico, floral y afrutado, con notas de acacia, cítricos, durazno y fruta tropical

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